505 ~ Hijo del reino
1
Hijo del reino, ¿por qué estás durmiendo, cuando a la vista se halla tu hogar? Presto levántate, ciñe tus armas; en el conflicto tendrás que luchar.
2
Hijo del reino, ¿por qué tardas tanto, cuando delante el premio se ve? Álzate, vístete, Cristo se acerca; sal a su encuentro, recibe a tu Rey.
3
No sigas más tras placeres mundanos: ves que su encanto pasando se va; rompe los lazos con que estás atado; a Cristo acude, que te amparará.
4
Fija tu vista constante en el Cielo; pasa la noche de tribulación; sobre las cúspides ya rompe el alba; ¡hijo del reino, prorrumpe en canción!