304 ~ Mi Redentor, el Rey de gloria
1
Mi Redentor, el Rey de gloria, que vive yo seguro estoy; y da coronas de victoria; a recibir la mía voy.
Coro:
Que permanezca, no pidáis, entre el bullicio y el vaivén; el mundo hoy dejar quisiera, aun cuando fuese cual Edén. El día, nada más, aguardo en que el Rey me diga: "Hijo, ven".
2
En mi Señor Jesús confío, su sangre clama a mi favor; es dueño él de mi albedrío, estar con él es lo mejor.
3
De tanto amor me maravillo, y no me canso de cantar; me libertó de mi peligro, sufriendo todo en mi lugar.
4
Consuélome en su larga ausencia pensando: Pronto volverá; entonces su gloriosa herencia a cada fiel Jesús dará.